La Vida En Un Bloque De Pisos Y Otras Aventuras Ruidosas
¿Alguna vez habéis escuchado esta frase?: "El buen vecino no es el que hace menos ruido, sino el que piensa en los demás antes de hacerlo". Fantástica y bonita también, claro… si se cumpliera. Pero os voy a contar. Yo, por ejemplo, vivo en un edificio, y mi vecino o vecina de arriba... bueno, digamos que si estuviera en una película, sería una de esas comedias absurdas en las que todo lo que sucede es un poco, digamos, demasiado ruidoso.
Lo curioso es que ni siquiera sé quién es. Al principio no sabía si era hombre o mujer, pero lo que sí sé es que tiene una vida social más activa que una Kardashian. Y yo, que me creía tranquila, me encuentro constantemente en el papel de espectadora involuntaria de su día a día, como si fuera un reality show de esos que no puedes dejar de ver, como el primer Gran Hermano de la historia. ¿Os acordáis de Ismael o de Jorge con su famosa frase “¡No me pongas la pierna encima!”? Pues algo así, pero con la diferencia de que en ese programa eras tú quien decidía verlo o no. En este caso, no me queda otra que aguantar y aguantar. Y por eso, este "reality" que tengo encima, aunque a veces lo desee, no es uno que pueda poner en pausa. ¡Desearía que fuera un anuncio al que pudiera saltar!
Ruidos Nocturnos: ¿Es Normal Hacer Mayonesa A Las 1:30 AM?
No sé qué pensaréis, pero para mí no es normal que a la 1:30 de la madrugada alguien decida hacer... ¡ma-yo-ne-sa! (Sé que la estáis cantando mentalmente). Pero no una mayonesa cualquiera, sino una que necesita batir con tanto fervor que ya os veis en el videoclip del verano de ¡Bate, que bate... el chocolate! Y, claro, se oye como si estuviera batallando con un robot gigante. Y, no sé si me equivoco, pero tal vez ha tenido que intentarlo varias veces porque la mayonesa se ha cortado. ¡A esa hora, no! ¡Que hasta el aceite tiene derecho a descansar!
Llamadas Telefónicas A Todo Volumen
Luego están las llamadas telefónicas. Aquí es donde descubrí que es una fémina, por su voz, porque además, resuena por todo el edificio, como si estuviera dando un discurso en la ONU, en vez de simplemente contarle a alguien cómo le va la vida. Es como si el teléfono tuviera un amplificador de volumen o lo hubiera metido en un botijo, ¡y no puedo evitar preguntarme si la conversación tiene algo que ver con salvar el mundo o algo por el estilo! Y, por si pensáis que es una llamada de 5 minutos... ¡nada de eso! Estamos hablando de charlas efusivas que duran 20 minutos o más. ¡Una maratón telefónica que podría competir con la duración de una telenovela turca!
Muebles En Movimiento A Las 5:30 AM
Pero lo que realmente me deja boquiabierta es su rutina mañanera. ¿A las 5:30 de la mañana, qué hace mi vecina? ¡Reorganiza el mobiliario como si fuera un juego de Tetris! Cada silla, mesa o taburete parece tener vida propia y decide moverse por todo el piso como si estuviera siendo arrastrado por una tormenta. Y, como si eso fuera poco, también decide poner una lavadora a las 5:30 de la mañana, y ahí ya tenemos el combo completo: Tetris y la musiquita de fondo de la lavadora. Yo no sé qué tipo de trastorno tendrá esta mujer, pero por favor, que mis neuronas también tienen derecho a descansar.
Los Pasos Más Sonoros De La Historia
Y, por último, como si ya fuera poco... ¡los pasos! ¡Esa forma de caminar! Cada vez que se mueve por su piso, parece que está practicando para ganar una medalla en los Juegos Olímpicos de la marcha pesada. ¡Pero el caso es que cada uno de sus pasos retumba como si fuera un tambor de guerra! Lo peor es que no es que esté corriendo; está simplemente caminando... ¿pero cómo puede sonar tan fuerte? No sé si está descalza o ha decidido que el suelo de su piso es el escenario perfecto para una audición de danza contemporánea... ¡pero, sinceramente, cada uno de sus pasos suena como si estuviera usando botas de plomo! He probado con tapones de oído, pero lo único que logran es amortiguar el sonido un poco... lo suficiente como para que no me oiga a mí gritar de frustración.
¿Soy Una Quejica O Es Cuestión De Respeto?
A veces pienso que soy un poco quejica, pero no es para menos, ¿no? De 12 de la noche a 6 de la mañana, todo lo que quiero y necesito es dormir como un ser humano normal. Ya sabéis, descansar, cargar las pilas. Como dato cotilla, sé a qué hora empieza su rutina diaria: ¡a las 13:00 horas es cuando sube la persiana! Lo sé porque lo vivo los fines de semana. Entre semana no sé su rutina, y no me importa lo que haga, siempre y cuando, de 12 a 6, se comporte como una persona normal. ¿No podríamos aplicar la famosa regla del “respeto mutuo”? No pido mucho, solo un poquito de tranquilidad por la noche.
Por si os estáis preguntando... no soy la única que lo está viviendo. En los ascensores ya empiezan a aparecer carteles sutiles como "Recordatorio: horarios de descanso" o "No nos interesa tu vida, puedes hablar más bajo". No son exactamente cartas de amor, pero el mensaje está claro.
Conclusión: Un Poquito De Silencio Nunca Viene Mal
Así que, vecina de arriba, si alguna vez lees esto (porque tengo la sensación de que vives en una película de realidad virtual con efectos especiales), no soy una persona difícil. Solo pido una cosita: que el mobiliario no haga más ejercicio que yo, que las llamadas telefónicas no se conviertan en un evento de masas y que la mayonesa se haga en un horario más adecuado para todos. Eso sí, te respeto muchísimo, pero un poco de silencio nunca viene mal, ¿verdad?
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